jueves, 24 de marzo de 2022

LA ADICCIÓN A LA TECNOLOGÍA

 La adicción a la tecnología se detecta cuando existe un uso excesivo y
descontrolado del celular, video-juegos, 
Internet o redes sociales, el cual impacta negativamente otras áreas de la vida de la persona. Además, cuando no puede utilizarlos se siente angustiada, tensa e indecisa.

El adicto a la tecnología pone como actividad prioritaria la utilización del objeto, y pasa a segundo lugar lo cotidiano, como pueden ser las relaciones familiares, los estudios, el trabajo o los amigos.

Se aísla de los miembros de la familia, y tiene comportamientos que generan problemas con los amigos, estudios y/o trabajo. Los adictos a los videojuegos tienden a eliminar la relaciones sociales por completo, ya que ésta es una actividad individual a la que se dedican mucho tiempo del día. La persona pasa mucho tiempo en Internet, hablando por el celular o pendiente al envío de mensajes.

Utiliza el celular para realizar todas las gestiones posibles; el contacto personal queda reducido al mínimo.

Aun estando con sus amigos, el adicto sigue usando el celular. O bien, va a todos los sitios con éste: a la comida, al baño, durante las clases... 

El afectado le miente a su familia, falta al trabajo o al colegio. Es decir, se convierte en esclavo de la tecnología, sin libertad de decisión ni control sobre su persona.

Los expertos mencionan que las consecuencias en un adicto a la tecnología pueden ser psicológicas, sociales, profesionales y económicas. A nivel psicológico, estas personas tienen baja autoestima, habilidades sociales limitadas, una elevada ansiedad y tendencia a la depresión.

La mejor solución es la prevención, que se consigue al estar informados sobre los problemas que puede generar el abuso de las nuevas tecnologías. Una vez inmersos en una adicción grave, es aconsejable la ayuda de un especialista que aporte las estrategias necesarias para solucionarlo.

Razones para “desenchufarte” de la tecnología


Aumentas tu capacidad de atención. De acuerdo con un informe McKinsey Global Institute, un trabajador promedio invierte hasta 28% de su tiempo semanal en consultar su mail.

El problema es que aunque es una de tus tareas, seguramente lo mezclas con otras, lo que en realidad no te permite hacer ninguna eficientemente.

Tendrás mejores relaciones. Los usuarios frecuentes de redes sociales son apáticos a realizar actividades de vida social.

Serás más creativo. Pasar varios días rodeado de naturaleza, alejado de los dispositivos electrónicos, está relacionado con las puntuaciones 50% más altas en pruebas de creatividad, indica un estudio de la University of Utah. Tomarte un “break tecnológico” será bueno para tu cerebro.


Evitas el dolor. Shin Eon, doctor del Jefferson University Hospital, indica que cada vez son más los casos en los que personas que utilizan el celular y computadoras, presenten un padecimiento llamado “pulgar de mensajes de texto”, una forma de tendinitis que afecta las manos y muñecas.

Cero adicciones. Aunque te parezca inofensivo estar todo el día con el celular en la mano, esto puede convertirse en algo peligroso.

El “chequeo” del celular puede tener el mismo efecto que las drogas, y en exceso, es altamente contraproducente.

Aunque puedas creer imposible apartarte de todos tus aparatos, la idea no es torturarte; intenta que al menos en tu día puedas pasar 30 minutos sin tener que revisar ninguno, así lograrás comprobar que estas razones para desenchufarse de la tecnología son en pro de tu bienestar.

Fuente: salud180.com

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